Manuela del Olmo |
Allá está la cumbre.
¿Qué miras? —Un astro.
¿Me amas? —¡Te adoro!
¿Subimos? —¡Subamos!
¿Qué ves? —Una aurora
fugitiva y pálida.
¿Qué sientes? —Anhelo.
Ésa es la esperanza.
¡Qué alientos de vida!
¡Qué fuegos de sol!
¡Qué luz tan radiante!
¡Ese es el amor!
¿Qué ves a tus plantas?
Un profundo abismo.
¿Tiemblas? —Tengo miedo…
¡Ese es el olvido!
Pero no tiembles ni temas:
bajo el sacro cielo azul,
para el que ama no hay abismos,
porque tiene alas de luz.
RUBÉN DARÍO (1867-1916), poeta nicaragüense. Rima XIII.
2 comentarios:
Rubén Darío, qué gran poeta, pensador, alma sensible... Un poema de él es siempre una caricia al espíritu.
La pintura de Manuela del Olmo es pura espiritualidad.
Inma, gran entrada, hasta aquí resplandece su aura.
Besos ***
Es un poema suyo que me apabulla, me atrae desde hace tiempo, lo tenía guardado en borrador y hoy me lancé a publicarlo. Y la pintura de Manuela del Olmo es junto al poema una conjunción, la descubrí hace un tiempo por Artelista o algo así, me encantó.
Gracias guapaaaa...besosss
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