Blog que difunde cultura, (poesía, arte, música, historia, política, desvaríos varios y reflexiones de todo tipo).
Pintura de H. Anglada Camarasa, "Sonia de Klamery, 1913.
Un potaje muy parecido a los que habitualmente se comen por mi tierra. En este caso el ingrediente principal es la calabaza la cual da nombre a la receta. La versión proviene de Guadahortuna (Granada) y probablemente se repetirá en muchas zonas de España. Una buena opción para comer la calabaza y las legumbres en un mismo plato.
Ingredientes:
1 kilo de calabaza 250 gramos de garbanzos. 250 gramos de judías verdes 250 gramos de patatas 1 cebolla grande 2 tomates medianos 2 ajos Azafrán Laurel Aceite de Oliva Sal
Instrucciones:
Ponemos en remojo los garbanzos la noche anterior. Al día siguiente cocemos los garbanzos en la olla con unas hojas de laurel hasta que queden tiernos.
Picamos la cebolla y sofreímos en una sartén con aceite hasta que quede bien pocha. Majamos los ajos en un mortero con el azafrán y un poco de aceite. Incorporamos al sofrito anterior junto con los tomates que hemos picado bien. Dejamos al fuego hasta que el tomate quede bien sofrito.
Añadimos el sofrito a los garbanzos. Es entonces cuando ponemos la calabaza cortada en dados, las patatas y las judías. Ponemos al fuego de nuevo y dejamos sobre una media hora hasta que los ingredientes estén tiernos. Corregimos de sal y servimos.
(Lo leí esta mañana en el blog Asopaipas, y he querido compartirlo con todos....¡¡me encanta este blog!!
"Tiempos que fueron, llantos y risas, negros tormentos, dulces mentiras, ¡ay!, ¿en dónde su rastro dejaron, en dónde, alma mía? "
Rosalía de Castro
Si hablo con un timorato me dice que me falta fe. Si lo hago con un optimista me dice que la vida es bella y tenemos que aprovecharla. Si es con un pesimista me dice que tengo razón, que la vida es una mierda y además con gente fea. Si lo hago con mi siquiatra me dice que no entiende nada de lo que me pasa, que hable. Estás canalizando mal tu vida, me dice un filósofo.
La gente insustancial tiene clara la vida, la estúpida también, montan una obra de teatro y son los actores principales. Pensar tanto es malo me dicen por ahí. Piensa un poco y no te quejes, me dicen otros. No me apetece charlar porque estás muy negativa. Charlemos y a ver si te animas un poco.
No comprenderás, lo sé, no obstante: escucha el dolor.
Vanguardista de oficio, la artista yugoslava empuja los límites mediante performances que ponen a prueba la resistencia del cuerpo y la mente. Su propia historia y la del mundo, son los materiales de exploración de esta gran mujer, Marina Abramovic.
Si hay alguna artista que ponga los vellos de punta y que no deje indiferente a nadie, esa es Marina Abramovic. Esta artista serbia nacida en Belgrado es una de las pioneras en la realización de performance.
Ritmo 0, 1974
Transgresora, rupturista, radical, son algunos de los adjetivos que conforman la obra y el papel de esta artista que desde sus inicios denuncia la opresión y el retraso de su realización como ser por culpa del sistema educativo establecido en su país, utilizando su propio cuerpo como elemento fundamental de la experiencia en la que basa su estudio comunicativo entre su ser y en entorno que le rodea, incluyendo al público en su propia performance y haciéndolo partícipe fundamental.
En una performance nocturna en la que exploraba la dinámica de la agresión pasiva, Abramovic aparecía junto a una mesa y se ofrecía a los espectadores, que podían hacer lo que quisieran con una serie de objetos y su cuerpo.
En la pared había un texto que rezaba: "Hay setenta y dos objetos en la mesa que pueden usarse sobre mí como se quiera. Yo soy el objeto".
Entre dichos objetos se contaba una pistola, una bala, una sierra, un hacha, un tenedor, un peine, un látigo, un pintalabios, una botella de perfume, pintura, cuchillos, cerillas, una pluma, una rosa, una vela, agua, cadenas, clavos, agujas, tijeras, miel, uvas, tiritas, sulfuro y aceite de oliva.
Al final de su performance, los espectadores le habían rasgado las ropas con cuchillas, le habían cortado, pintado, limpiado, decorado, coronado con espinos y encañonado con el arma cargada. Al principio el público actuaba con timidez, pero transcurridas seis horas, empezó a comportarse violentamente y algunos espectadores, consternados, pusieron fin a la performance. Abramovic describió esta obra como la conclusión de la investigación en su propio cuerpo.
En esta obra la artista es el propio objeto del arte. Pasa de sujeto activo (artista) o sujeto pasivo (modelo) a sujeto-objeto, trasladando el rol de artista al público. Su cuerpo como lienzo, pero en él se pueden hacer más cosas que pintar, es un cuerpo sobre el que experimentar lo que uno, por norma general no experimentaría en su propio cuerpo. Transgrede las leyes físicas y psíquicas y se experimenta con otro el ¿hasta dónde se puede llegar con mi cuerpo pero sin ser en mi cuerpo?
Los límites de la sociedad están muy delimitados y lo correcto y lo incorrecto, si se da manga ancha, a veces sobrepasan esos límites, es la consciencia de uno mismo la que debe poner fin a los hechos pero es uno mismo, como artista, el que debe establecer las líneas de sus investigaciones.
“Estoy interesada en un arte que perturbe y rompa ese momento de peligro; por eso, el público tiene que estar mirando aquí y ahora. Deja que el peligro te concentre; esta es la idea, que te concentres en el ahora.”
Su ambicioso y profundo proyecto se encamina a descubrir un método, a través del arte, que haga a la gente más libre.
A pesar de lo que pudiera parecer en un primer golpe de vista, el trabajo de Marina huye del sensacionalismo; es un trabajo de un profundo trasfondo filosófico donde el miedo, la incomunicación o la soledad, algo aparentemente (pero sólo en apariencia) contradictorio con la necesaria presencia del público, que llega a ser una parte activa con la que la artista dialoga y obliga a enfrentarse a las mismas sensaciones que Marina experimenta en muchos de sus trabajos.
Recuerdo que en abril pasado actuaba en el Teatro real junto a Antony Hegarty, Willem Dafoe y Bob Wilson , interpretaba su biografía, "Vida y muerte de Marina Abramovic", que me hubiera encantado ver. Os dejo un vídeo sobre esa actuación, impresionante, irrepetible, para entenderla y conocerla.
"Lo que estoy haciendo es inventar hechos que me dan miedo, dice ella cuando se le pregunta, un sentimiento demasiado profundo que es imposible explicarlo con palabras”. Es la forma de canalizar su vida, es su mecanismo de supervivencia. "Convertir mi vida en un espectáculo para distanciarme del dolor"
A veces, aunque duela, tenemos que caernos y, desde lo más hondo, tocar el infinito en la lombriz sin ojos que viene a saludarnos.
La huida, Paul Delvaux, 1936
Sobre el dolor de estar y no ser querido pongo el mantel y espero la cena.
Cada habitación tiene un sonido a modo de selva o de tormenta.
Pero es en el baño donde los espejos no disimulan, escupen. Cada rincón tiene su nido y allí las arañas preparan sus telas; pero es en el patio donde me dedico a despiojar niños y aplasto las liendres con las uñas como si fuese una gran cacería de dedos largos y pelo sucio.
Sobre el dolor se quejan mis manos y yo me olvido, no existo; ni siquiera a golpes abro la boca. ANA MERINO, Poeta española nacida en Madrid en 1971
Mi vida es monótona. Cazo gallinas, los hombres me cazan. Todas las gallinas se parecen y todos los hombres se parecen. Me aburro, pues, un poco. Pero, si me domesticas, mi vida se llenará de sol [...]
Anca Costache, estremecimiento en colores
Tengo tiempo. Tengo todo el tiempo del mundo.
En realidad todos tenemos todo el tiempo del mundo.
"La realidad es terrorífica. No me es posible hablar o escribir. Hay una pequeña brizna de esperanza, pero es tan minúscula que resulta insustancial" L. ALTHUSSER
Pierre Puvis de Chabannes, mujer loca
Tenemos la misma horrible ceguera, la misma ceniza en los ojos, la misma tierra en la boca. Tenemos el mismo amanecer y la misma noche: nuestra inconsciencia. Compartimos la misma historia y ahí es donde empieza todo. Y donde termina.
Uno tiene la angustia, la desesperación de no saber qué hacer con la vida, de no tener un plan, de encontrarse perdido.
Pío Baroja
Zdzislaw Beksinski (Sanok, 1929 -Varsovia, 2005) fue fotógrafo, pintor y escultor, y aunque en sus inicios practicó el arte abstracto, es conocido principalmente por sus pinturas surrealistas.
Por lo general representaba desolados parajes desérticos poblados comúnmente por seres de aspecto cadavérico, donde se alzan extrañas construcciones en ruinas y de antiguas y abandonadas civilizaciones. Representaba los cuerpos humanos dando la sensación de dolor, agonía tortura y desesperanza.
Las hojas muertas se recogen con un rastrillo
Los recuerdos y las penas, también.
Y el viento del norte se las lleva
Jacques Prevert
En 1977 quemó varios de sus trabajos en el patio de su casa, sin dejar ni siquiera documentación sobre ellos, por considerar que eran demasiado personales o que no tenían la suficiente calidad para que la gente los viera.
Beksinski pintaba siempre escuchando música clásica, ya que aborrecía el silencio.
Ninguna de sus obras tiene nombre.
¿Qué importancia puede tener que yo me atormente, que sufra o que piense? Mi presencia en el mundo no hará más que perturbar, muy a mi pesar, algunas existencias tranquilas y turbar (más aún a mi pesar) la dulce inconsciencia de algunas otras. A pesar de que siento que mi propia tragedia es la más grave de la historia (más grave aún que la caída de los imperios o cualquier derrumbamiento en el fondo de una mina), poseo el sentimiento implícito de la nimiedad y de mi insignificancia.
Emil Ciorán
El 21 de febrero de 2005 el pintor polaco Zdzislaw Beksinski fue encontrado muerto en su apartamento de Varsovia con diecisiete puñaladas en su cuerpo, dos de las cuales se consideraron mortales. Robert Kupiec (el hijo adolescente de su cuidador) y un amigo fueron detenidos poco después del crimen. Robert Kupiec se declaró culpable y fue condenado a 25 años de prisión por un tribunal de Varsovia, y su cómplice a 5 años. Poco antes de su muerte, Beksinski le había negado un préstamo a Kupiec.
Los últimos años de su vida habían sido muy duros. Su mujer, Zofia, murió en 1998. Un año después, en la víspera de Navidad de 1999, su hijo Tomasz (un popular presentador de radio y periodista musical) se suicidó. El propio Beksinski descubrió el cuerpo de su hijo.
Les dejo el link de su web oficial beksinski (de ahí subí los cuadros) y el blog de donde saqué parte del texto.
El dolor es una cosa bestial y feroz .. Cesare Pavese
Este horror y dolor que lleva decenas de años: la masacre sistemática del pueblo Palestino por el estado de Israel y sus aliados, el genocidio apañado, el ensañamiento nazi-fascista con el que las tropas israelitas masacran a seres humanos de todas las edades y atacan poblaciones civiles .. ¡tiene que terminar! En nuestra tele, la del régimen, cuentan las muertes de los israelitas, y ese señor que manda en estados unidos anima a estos a seguir matando palestinos, y mientras el mundo calla. Como siempre.
¡Yo utilizo mi ingenio para pintar las delicias de la crueldad!
No es bueno que todo el mundo lea las páginas que siguen; sólo algunos saborearán sin peligro ese fruto amargo.
Lautréamont
[..] Hay horas en la vida en que el hombre de melena piojosa lanza, con los ojos fijos, miradas salvajes a las membranas verdes del espacio, pues le parece oír delante de sí, el irónico huchear de un fantasma. Él menea la cabeza y la baja; ha oído la voz de la conciencia. A veces, en noches de tormenta, cuando legiones de pulpos alados, que de lejos parecen cuervos, se ciernen por encima de las nubes, dirigiéndose con firmes bogadas hacia las ciudades de los humanos, con la misión de prevenirles que deben cambiar de conducta, el guijarro de ojo sombrío ve pasar, uno tras otro, dos seres a la claridad de un relámpago, y, enjugando una furtiva lágrima de compasión que se desliza desde su párpado helado, exclama: Por cierto que lo merece, no es más que un acto de justicia [..] Conde de Lautreamont ("Cantos de Maldoror"). Isidore Ducasse, mejor conocido por su seudónimo “El Conde de Lautréamont”, nace el 4 de abril de 1846 en Montevideo, Uruguay. (Maldoror, abreviatura de "Mal d'aurore"), sus 6 cantos describen el absurdo de la existencia humana.
El dolor envejece más que el tiempo, este dolor dolor que no se acaba, y que te duele todo todo todo sin dolerte en el cuerpo nada nada.
Mark Rothko
Invade el mundo un ¡ay! un ay atroz, y siempre el ¡ay! del ¡ay! es ley del hoy. el ¡ay! porque no hay. El ¡ay de mí! porque no hay -ay de ti- El ¡ay! del Norte al Sur es la única canción. Sólo hay un ¡ay! porque no hay amor.
Karel Teige. Ensayista checo, (Praga,1900-1951). En 1924 redactó el manifiesto del poetismo, movimiento vanguardista fundamentado en las teorías futuristas y dadaístas.
Karel Teige
Hacia 1935 se erigió en portavoz del grupo surrealista checo, opuesto a la creciente presión del realismo socialista. De su obra cabe destacar: Hacia una sociología de la arquitectura(1930), La feria del arte (1936) y El surrealismo a contracorriente (1938).
Se atrevió con pinturas, collages, fotomontajes, portadas de libros y guiones cinematográficos. Teige también editó a algunos de los más influyentes de la vanguardia checa y revistas sobre asuntos culturales internacionales y escribió libros profundamente originales y ensayos sobre arte y arquitectura.