*.- Hoy cumple 96 años Marcos Ana, vuelvo a editar esta entrada para rendir homenaje a un ser humano grandioso, solidario, fiel a sus principios e ideales, un poeta hecho en la cárcel, una ternura de hombre.
*Por el delito de haber querido "llenar de estrellas / el corazón del hombre", de haber luchado por un mundo mejor, más libre y con mayor justicia social, el poeta ha sido encarcelado y desde la cárcel grita su dolor, un dolor en donde no existe sin embargo ningún espacio para el odio.
(Entrada publicada el 17 de Noviembre de 2013 y actualizada el 20 de Enero de 2016)
Un día como hoy, 17 de Noviembre, pero del año 1961, el poeta y preso político que más tiempo estuvo en las cárceles franquistas, Marcos Ana, fue puesto en libertad. Un calvario que se inició en marzo de 1939, cuando cayó prisionero en Alicante, en manos de los fascistas italianos de la División Littorio, y fue recluido en el campo de concentración de Albatera.
Tras huir del campo de concentración de Albatera, Marcos Ana fue detenido en mayo de ese mismo año 1939 en Madrid y torturado durante cuarenta y tres días en la ya citada comisaría de la calle Almagro 39. Pero, ¿acusado de qué delito?:
"Mi pecado es terrible;
quise llenar de estrellas
el corazón del hombre.."
En las cárceles, Marcos Ana comenzará a hacerse conocido por mantener en alto el espíritu entre los detenidos mientras esperaba la ejecución de la sentencia. Estuvo preso junto a Miguel Hernández, al que llegó a conocer antes de su muerte.
Tiene el extraño récord de ser el reo que más tiempo pasó en las cárceles de Franco: 23 años
Entre condena y condena a muerte, comenzó a escribir poesía y se convirtió en un icono de resistencia.
* Os dejo varios poemas suyos inconmensurables, poemas que parten el alma en dos, que nos dice y grita qué es la libertad, la dignidad y el compromiso de los seres humanos. Sintámonos culpables y cómplices, oigamos nuestra voz interior, esa que ahora anda indolente y dormida, y alcemos un grito alto y profundo a la libertad y dignidad de todos, que este 17 de Noviembre sea un pistoletazo de salida por estar tanto tiempo arrodillados, pongámonos de pie:
Y no basta decir: "alma, no llores",
si ves a un corazón que va dejando
la vida entre furiosos desgarrones.
Hay lágrimas que tienen estatura
de estrellas indomables
y es de acero o de roble su ternura.
"Mi primera relación con una mujer fue cuando por fin salí de prisión. Ella era una prostituta muy dulce que cuando supo mi historia no me quiso cobrar"
Autobiografía
Mi pecado es terrible;
quise llenar de estrellas
el corazón del hombre.
Por eso aquí entre rejas,
en diecinueve inviernos
perdí mis primaveras.
Preso desde mi infancia
y a muerte mi condena,
mis ojos van secando
su luz contra las piedras.
Mas no hay sombra de arcángel
vengador en mis venas:
España es sólo el grito
de mi dolor que sueña.
¿Qué fue lo más difícil de aquellos 23 años de cárcel?
– "La libertad. Adaptarme al mundo. Cuando salía al campo en aquellos primeros meses fuera de prisión me mareaba hasta el vómito. Y era, según los médicos, porque el nervio óptico se había acostumbrado a espacios cerrados y verticales. Así que nací de nuevo a los 41 años. A esa edad tuve que descubrir la trama excitante de la vida, como un niño. Las dos especies más cambiadas que encontré al salir de la cárcel fueron las mujeres y los coches".
(...) si un río se alza para hablar con la luna,
ponedle un dique oscuro.
Si una estrella olvidando su distancia se mece
en los agraces labios de un muchacho,
denunciadla a los astros.
Cuando un corzo se beba la libertad y el bosque,
atadlo como a un perro.
Si hay algún pez que aprende a vivir sin el agua,
negadle orilla y tierra.
Si el alba se deslumbra con claridad ajada,
poned las hojas verdes de la noche en sus ojos.
Si hay un hombre que tiene
el corazón de viento,
llenádselo de piedras
y hundidle la rodilla sobre el pecho.
http://decidmecomoesmarcos.blogspot.com.es/2009/09/conversacion-con-marcos-ana.html
Aute y Marcos Ana |
Poema en su libreta original |
Es un narrador de excepción contando historias de vidas que basculan entre el drama, la poesía y el melodrama. Soñar, siempre soñar, con los ojos sin sueño, escribió uno cualquiera de los días en los que fue profesor de sueños a lo largo de veintitrés años. Entre hambre, frío, sacas de hombres fusilados junto a las tapias de los cementerios, cerraba los ojos y soñaba con una plaza, con un árbol, con un río, con una mujer. Así es Marcos Ana