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sábado, 13 de junio de 2015

FIN DE FIESTA - (UN CUERPO QUE PARECE SER MÍO)

"Soy este olvido que cultivo y en el que me hundo, diminuta.
Soy canto, soy agua.
Soy delirio y desvarío.
Soy mujer contundente,
y tengo miedo.
Miedo a perder toda mi generosa visión del mundo.
Miedo a perder mi ternura y ser solo (como bien dice la poeta Silvia Tomasa Rivera) una idea perdida."
 (Inma)





"Porque no tengo necesidad de hablar
estoy callada.
Suena triste pero es más verdad que el silencio.
Anoche hablé hasta que me dolió la comisura
de los labios.
Pero anoche era un tigre.
Ahora soy aquella, la hija del hombre:
sin mañana
sin semilla
sin voz.
Sólo una idea perdida
entre la ropa sucia."


*.- Silvia Tomasa Rivera, (poeta de México, 1956)


(Gracias a todos por tanta ternura con la que habéis entrado en mi rincón, mi alma. Voy a alejarme un poco, sigo siendo una mujer ingenua que cree en el ser humano, aunque me den muchas bofetadas. Y me da pena irme un día en que la humanidad y la dignidad entra como alcaldesa de Madrid con Manuela)


(Pintura de Kees van Dongen, soy todas sus mujeres)


viernes, 12 de junio de 2015

ÁNGEL GONZÁLEZ - CUATRO POEMAS

Marc Chagall


INMORTALIDAD DE LA NADA

Todo lo consumado en el amor
no será nunca gesta de gusanos.

Los despojos del mar roen apenas
los ojos que jamás
(porque te vieron),
jamás
se comerá la tierra al fin del todo.

Yo he devorado tú
me has devorado
en un único incendio.

Abandona cuidados:
lo que ha ardido
ya nada tiene que temer del tiempo.


***


NADA ES LO MISMO

La lágrima fue dicha.

Olvidemos
el llanto
y empecemos de nuevo,
con paciencia,
observando a las cosas
hasta hallar la menuda diferencia
que las separa
de su entidad de ayer
y que define
el transcurso del tiempo y su eficacia.

¿A qué llorar por el caído
fruto,
por el fracaso
de ese deseo hondo,
compacto como un grano de simiente?

No es bueno repetir lo que está dicho.
Después de haber hablado,
de haber vertido lágrimas,
silencio y sonreíd:

nada es lo mismo.
Habrá palabras nuevas para la nueva historia
y es preciso encontrarlas antes de que sea tarde.


***


LA LUZ A TI DEBIDA

Sé que llegará el día en que ya nunca
volveré a contemplar
tu mirada curiosa y asombrada.
Tan sólo en tus pupilas
compruebo todavía,
sorprendido,
la belleza del mundo
—y allí, en su centro, tú
iluminándolo.

Por eso, ahora,
mientras aún es posible,
mírame mirarte;
mete todo tu asombro
en mi mirada,
déjame verte cuando tú me miras
también a mí,
asombrado
de ver por ti y a ti, asombrosa.


***


EPÍLOGO

Me arrepiento de tanta inútil queja,
de tanta
tentación improcedente.
Son las reglas del juego inapelables
y justifican toda, cualquier pérdida.
Ahora
sólo lo inesperado o lo imposible
podría hacerme ll0rar:

una resurrección, ninguna muerte.



Ángel González, (1922/2008). Poeta, catedrático y ensayista español nacido en Oviedo. Perteneciente al grupo conocido como "Generación de los 50" o del medio siglo. Dueño de una poesía humanamente comprometida, teñida de fina ironía y humor.


Marc Chagall


miércoles, 10 de junio de 2015

JULIO CORTÁZAR - TRES SONETOS ERÓTICOS




Tres sonetos eróticos


Su mono azul le ciñe la cintura,
le amanzana las nalgas y los senos,
la vuelve un muchachito y le da plenos
poderes de liviana arquitectura

Al viento va la cabellera oscura,
es toda fruta y es toda venenos;
el remar de sus muslos epicenos
inventa una fugaz piscicultura.

Amazona de mono azul, el arte
la fija en este rito paralelo,
cambiante estela a salvo de mudanza;

viejo poeta, mírala mirarte
con ojos que constelan otro cielo
donde no tiene puerto tu esperanza.



***


Una carta de amor

Todo lo que de vos quisiera
es tan poco en el fondo
porque en el fondo es todo,

como un perro que pasa, una colina,
esas cosas de nada, cotidianas,
espiga y cabellera y dos terrones,
el olor de tu cuerpo,
lo que decís de cualquier cosa,
conmigo o contra mía,

todo eso es tan poco,
yo lo quiero de vos porque te quiero.

Que mires más allá de mí,
que me ames con violenta prescindencia
del mañana, que el grito
de tu entrega se estrelle
en la cara de un jefe de oficina,

y que el placer que juntos inventamos
sea otro signo de la libertad.


***




Liquidación de saldos


Me siento morir en ti, atravesado de espacios
que crecen, que me comen igual que mariposas
hambrientas.

Cierro los ojos y estoy tendido en tu memoria,
apenas vivo,
con los abiertos labios donde remonta el río del
olvido.

Y tú, con delicadas pinzas de paciencia me
arrancas los dientes, las pestañas, me desnudas
el trébol de la voz, la sombra del deseo,
vas abriendo en mi nombre ventanas al espacio
y agujeros azules en mi pecho
por donde los veranos huyen lamentándose.

Transparente, aguzado, entretejido de aire
floto en la duermevela, y todavía
digo tu nombre y despierto acongojado.

Pero te esfuerzas y me olvidas,
yo soy apenas la burbuja
que te refleja, que destruirás
con sólo un parpadeo.



Julio Cortázar




sábado, 6 de junio de 2015

PAUL VERLAINE - MI SUEÑO

"Mujeres tumultuosas", Paul Delvaux


Mi sueño

Sueño a menudo el sueño sencillo y penetrante
de una mujer ignota que adoro y que me adora,
que, siendo igual, es siempre distinta a cada hora
y que las huellas sigue de mi existencia errante.

Se vuelve transparente mi corazón sangrante
para ella, que comprende lo que mi mente añora;
ella me enjuga el llanto del alma cuando llora
y lo perdona todo con su sonrisa amante.

¿Es morena ardorosa? ¿Frágil rubia? Lo ignoro.
¿Su nombre? Lo imagino por lo blando y sonoro,
el de virgen de aquellas que adorando murieron.

Como el de las estatuas es su mirar de suave
y tienen los acordes de su voz, lenta y grave,
un eco de las voces queridas que se fueron...




Paul Verlaine, (1844 – 1896)



"Dices que se desborda tu loco corazón y que grita en tu sangre la más loca pasión; deja que clarinee la fiera voluptuosa.."


martes, 2 de junio de 2015

ALOYSIUS "ALOIS" ALZHEIMER, ENAMORADO


"...dejará la memoria en donde ardía."
Francisco de Quevedo


"Se me olvidó que te olvidé."
Lolita de la Colina


"La muerte no llega con la vejez, sino con el olvido."
Gabriel García Márquez

"Que un no ser, que es un más ser, doblado, prendido estás aquí y estás ausente por praderas de magias y de olvido."
Alfonsina Storni



Cuando el joven doctor Aloysius A. se descubrió enamorado de la enfermera Greta tras un par de aprietes fogosos en un oscuro pasillo del pabellón de Insania y Trastornos de la Memoria del Hospital de Psiquiatría de Frankfurt, se/le prometió, con la trémula certeza de quien extiende una receta para una dolencia incurable, que amor y furor serían para toda la vida.

Cuando en la luna de miel despertó una mañana con la cama revuelta, la ventana abierta y a Greta con el culo al aire y el sol purísimo de los Alpes haciéndole honor y justicia, el enamorado Aloysius supo que jamás podría olvidar los besos torpes, los polvos mágicos, las palabras de pasión entrecortadas. Y dejó constancia en cuatro estrofas rilkeanas que pudorosa y sabiamente nunca le mostró.

Cuando tras treinta años de relación –hijos y nietos mediante– le dijo por segunda vez te amo Helga a Greta y ella se lo hizo notar, él lo notó / anotó con tinta roja y letra gótica en una germana planilla: el día y la hora del percance, los primeros avances de una quinta columna que le amenazaba el cerebelo occipital o cualquier otra zona de amor desguarnecida.

Cuando no le pudo decir a la vendedora callejera el nombre de esas flores tan simples y hermosas, chiquitas, de pétalos así y del mismo color de los taxis de Munich y se perdió en camino a su propia fiesta de aniversario en la que brilló por su ausencia, tampoco pudo anotar nada en la planilla: no sabía dónde estaba su escritorio.

Cuando finalmente el viejo y sabio Aloysius A. murió en algún lugar que nunca supo ni sabría y apretando la mano de Greta o de quién sabe quién creía, sonrió de últimas. Porque aunque le fallaran las triviales / ocasionales coordenadas, el amor –que nunca se entera de nada– había pasado por él y en Alguna Planilla sin tinta ni solemne gótica estaba registrado. Y no sabía para qué, pero alcanzaba.


Por Juan Sasturain


http://www.pagina12.com.ar/diario/contratapa/13-273929-2015-06-01.html




Aloysius "Alois" Alzheimer fue el investigador alemán que identificó por primera vez los síntomas de la famosa enfermedad que lleva por nombre su propio apellido. Experto en psiquiatría y neurología, este eminente doctor nació en Baviera, en 1864, y murió en Breslavia, en 1915.


"Hubo momentos en que no sólo me olvidé de mí, sino también de lo que soy."

Samuel Beckett


jueves, 28 de mayo de 2015

MARISA PEÑA - UNA DELICIA DE MUJER

Los nadies: los hijos de nadie, los dueños de nada.
Los nadies: los ningunos, los ninguneados, (...)

Galeano


Margarita Sikorskaia, nacida en 1968, en San Petersburgo, Rusia


A veces imagino una tormenta,
un viento frío, una cuchillada,
y entiendo lo que sufren esos nadies
que se levantan en la incertidumbre
sin un lugar donde caerse muertos.
Y acuso a los mercados,
y a los mercaderes,
y a los políticos,
y a los banqueros,
y a los que les negaron,
siempre inmisericordes,
el pan y la sal,
por el bien de occidente,
por el bien del euro,
por el bien del dolar,
por el bien del consumo,
por el bien de la bolsa,
y del IBEX, y del PIB,y del IVA...
en fin, ustedes saben,
de nuestra poderosa economía.
Y a veces imagino
puestos a imaginar un imposible,
que empiezan a importarnos
las cosas importantes:
la dignidad humana, el bien común,
el agua de los ríos,
el mar inmesurable en su grandeza,
los árboles, por siempre protectores,
la risa contagiosa de los niños,
el amor, la alegría, las mañanas,
la sonrisa del otro,
el café compartido,
la palabra precisa,
la justicia, el amparo,
la convicción profunda, la utopía.
Esas pequeñas cosas
acaso imperceptibles,
tan grandes, necesarias,
tan nuestras, tan de todos, tan de ellos...
tan fieramente humanas.


***


El tiempo que nos queda


"Somos el tiempo que nos queda"
J. M. Caballero Bonald.


Eso somos: el tiempo que nos queda,
el último latido detenido,
la palabra no dicha,
el desierto cruzado,
y la senda sin nombre
que dejamos atrás.

Somos el abandono, la intemperie,
las luces apagadas,
y las puertas, cerradas para siempre,
tras un adiós forjado en la costumbre.


Pero somos el tiempo que nos queda,
la voz que no se apaga,
la azada que aún golpea, sin rendirse,
el poema no escrito,
la ópera inacabada de Puccini,
la derrota asumida, masticada,
y aquello que nos queda por vivir.


Marisa Peña, poeta madrileña contemporánea. http://sonetosdelamoroscuro.blogspot.com.es/


Margarita Sikorskaia