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sábado, 31 de enero de 2015

CHARLES BUKOWSKI Y SUS POEMAS MALDITOS

Lyonel Feininger, uno de los primeros maestros de la Bauhaus. 1913



LOS EXTRAÑOS


puede que no lo crean
pero hay gente
que va por la vida
con muy poca
fricción o
angustia.
visten bien, comen
bien, duermen bien.
están contentos con
su vida
familiar.
tienen momentos de
congoja
pero dentro de todo
permanecen imperturbables
y a menudo
se sienten muy bien.
y cuando mueren
es una muerte tranquila,
usualmente mientras
duermen.

puede que no lo
crean
pero gente así
existe.

pero yo no soy uno de
ellos.
oh no, no soy uno
de ellos,
no estoy ni tantito cerca
de ser
uno de
ellos

pero ellos están
ahí

y yo estoy
aquí


Lyonel Feininger, 1918


TODO


Los muertos no necesitan 
aspirina o 
tristeza 
supongo. 

pero quizás necesitan 
lluvia. 
zapatos no 
pero un lugar donde 
caminar. 

cigarrillos no, 
nos dicen, 
pero un lugar donde 
arder. 

O nos dicen: 
Espacio y un lugar para 
volar, 
da 
igual. 

los muertos no me 
necesitan. 

ni los 
vivos. 

pero quizás los muertos se necesitan 
unos a 
otros. 

En realidad, quizás necesitan 
todo lo que nosotros 
necesitamos 


necesitamos tanto 
Si solo supiéramos 
qué 
es. 

probablemente 
es 
todo 

y probablemente 
todos nosotros moriremos 
tratando de 
conseguirlo 

o moriremos 

porque no 
lo 
conseguimos. 

Espero que 
cuando yo este muerto 
comprendáis 

que conseguí 
tanto 
como 
pude.


Lyonel Feininger, 1918


Y LA LUNA Y LAS ESTRELLAS Y EL MUNDO


largas caminatas 
nocturnas 
son buenas 
para el 
alma: 
viendo furtivamente a través de las ventanas 
mirando extenuadas 
amas de casa 
intentando escabullirse 
de sus frenéticamente encervezados 
maridos.


Lyonel Feininger, 1918


POBREZA


Es el hombre que nunca has visto
el que te sostiene en la lucha,
ese que llegará
algún día.

Él no está afuera en las calles o
en los edificios, o en los
estadios,
o si está ahí
me lo perdí, de algún modo.

Él no es uno de nuestros presidentes
hombres de estado o actores.

Me pregunto si está ahí.
Camino por las calles
paso kioscos y hospitales,
teatros y cines, cafés
y me pregunto si él está ahí.

He buscado casi medio siglo
y no lo he visto.
Un hombre vivo, verdaderamente vivo
que cuando baje sus manos
después de encender un cigarrillo
veas sus ojos
como los ojos de un tigre mirando el pasado
en el viento.

Pero cuando las manos bajan
son siempre
los otros ojos
que están ahí
siempre, siempre.

Y pronto será demasiado tarde para mí
y habré vivido una vida
con kioscos, gatos, sábanas, saliva,
diarios, mujeres, puertas y otras cosas,
pero en ningún lado
un hombre vivo.

Charles Bukowski



viernes, 30 de enero de 2015

TRES POEMAS DE JUANA DE IBARBOUROU

Edward Hopper

ANGUSTIA

Hoy estoy triste, amor. Hoy tengo el alma
gris y desmelenada.
¡Tierra propicia para toda pena!
¡Para todo placer tierra negada!

La rosa de mi cuerpo
hoy es lirio beato.
Con triples vendas la ciñó la angustia
y yo con triples velos la recato.
Hoy estoy triste, amor. Hoy no pretendo
sentir mi risa.
¡Me endurece los labios
un agror de ceniza!


Mujer al borde de un torrente / Aristide Maillol



IMPLACABLE


Y te di el olor
De todas mis dalias y nardos en flor.

Y te di el tesoro,
De las ondas minas de mis sueños de oro.

Y te di la miel,
Del panal moreno que finge mi piel.

¡Y todo te di!
Y como una fuente generosa y viva para tu alma fui.

Y tú, dios de piedra
Entre cuyas manos ni la yedra medra;

Y tú, dios de hierro,
Ante cuyas plantas velé como un perro,

Desdeñaste el oro, la miel y el olor.
¡Y ahora retornas, mendigo de amor,

A buscar las dalias, a implorar el oro,
A pedir de nuevo todo aquel tesoro!

Oye, pordiosero:
Ahora que tú quieres es que yo no quiero.

Si el rosal florece,
Es ya para otro que en capullos crece.

Vete, dios de piedra,
Sin fuentes, sin dalias, sin mieles, sin yedra.

Igual que una estatua,
A quien Dios bajara del plinto, por fatua.

¡Vete, dios de hierro,
Que junto a otras plantas se ha tendido el perro!


Henri Manguin - 1918


LACERÍA


No codicies mi boca. Mi boca es de ceniza

Y es un hueco sonido de campanas mi risa.


No me oprimas las manos. Son de polvo mis manos,

Y al estrecharlas tocas comida de gusanos.


No trences mis cabellos. Mis cabellos son tierra

Con la que han de nutrirse las plantas de la sierra.


No acaricies mis senos. Son de greda, los senos

Que te empeñas en ver como lirios morenos.


¿Y aún me quieres, amado? ¿Y aún mi cuerpo pretendes

Y, largas de deseo, las manos a mí tiendes?


¿Aún codicias, amado, la carne mentirosa

Que es ceniza y se cubre de apariencias de rosa?


Bien, tómame. ¡Oh laceria!

¡Polvo que busca al polvo sin sentir su miseria!




JUANA DE IBARBOUROU, poeta uruguaya.



Frases:

"Así, cuando yo muera, he de ser a tu lado una pequeña llama de dulzura infinita para tus largas noches de amante desolado".


"Llueve, llueve, llueve, y voy, senda adelante, con el alma ligera y la cara radiante, sin sentir, sin soñar, llena de la voluptuosidad de no pensar".








domingo, 25 de enero de 2015

SERIE "MUJERES LLORANDO", DE PABLO PICASSO - AÑO 1937 - [VÍDEO]


"Travesía de muralla a muralla,
el abismo es el párpado,
allí naufraga el mundo
arrasado por una lágrima". (Blanca Varela).


Mujer que llora, 1937, Picasso

En 1937, Pablo Picasso pinta el cuadro Mujer que llora, en el que presenta el sufrimiento y el dolor de una mujer ante la guerra civil española.

Es un cuadro que transmite gran emoción mediante colores fuertes, como rojos y amarillos (colores de la bandera republicana junto con el morado), verdes y negros y formas y planos geométricos. Las líneas de contorno de la figura son negras y están muy marcadas y vemos como la boca, el pañuelo y las manos están en blanco y negro para acentuar el contraste y llamarnos la atención hacia ese grito desgarrador que parece emitir la figura.

Es un cuadro que no nos deja indiferentes y llama la atención el llamativo sombrero con flor, el pelo que parece recién peinado y ese abrigo con pespuntes. Si nos fijamos en los ojos, parecen abiertos de par en par, como transmitiendo la desesperación y el dolor que produce una guerra.

En 1986 este cuadro fue robado del Museo de Melbourne en Australia por un grupo llamado Terroristas Culturales Australianos.

Los colores fuertes y las pinceladas rígidas describen toda la intensidad desgarradora del dolor que siente esta afligida mujer. La atención del espectador se centra de inmediato en la zona fría, azul y blanca, en torno a la boca y los dientes. Los ojos y la frente están dislocados, literalmente rotos por la pena. La figura recuerda a las del gran muralGuernica, que Picasso pintó el mismo año y que representa una matanza de la guerra civil española. 

Este cuadro es uno de los más expresivos de la serie titulada "mujeres llorando":


Mujer llorando, 1937
Mujer llorando, 1937
Cabeza de mujer llorando con pañuelo III


El dolor y el sufrimiento se hacen patente en la serie. No hay lugar para la serenidad y el equilibrio. Las líneas se quiebran, los colores se contraponen. 

Las tonalidades intensas captan la atención hacia los puntos más dramáticos: las manos, los ojos y la boca. 

El tiempo y el espacio se fragmentan ante el caos, la inseguridad y la desesperación. 


La serie es un grito de dolor ante las atrocidades de la guerra. 



Cabeza de mujer llorando con pañuelo I


Lloremos. ¡Ah! Lloremos purificantes lágrimas, hasta ver disolverse el odio, la mentira, y lograr algún día (sin los ojos lluviosos) volver a sonreírle a la vida que pasa.


Oliverio Girondo


Cabeza de mujer llorando con pañuelo II

Mujer llorando, 1937
Mujer llorando, 1937


"Hay que recuperar, mantener y transmitir la memoria histórica, porque se empieza por el olvido y se termina en la indiferencia", lo decía Saramago en el 2005.

También recordando a Antonio Machado, que decía: "¡Madrid, Madrid, qué bien tu nombre suena / rompeolas de todas las Españas! / La tierra se desgarra, el cielo truena / tú sonríes con plomo en las entrañas".


SALVADOR BACARISSE - ROMANZA


*.- Concertino para guitarra y orquesta en la menor , Opus 72-(1957), de Bacarisse, compositor español exiliado de guerra, murió en París en el 1963, nos dejó esta romanza tan conocida.