William Whaterhouse |
La mujer alcanzó la perfección.
Su cuerpo muerto muestra la sonrisa de realización,
la apariencia de una necesidad griega
fluye por los pergaminos de su toga,
sus pies desnudos parecen decir,
hasta aquí hemos llegado, se acabó.
Los niños muertos, ovillados, blancas serpientes,
uno a cada pequeña jarra de leche ahora vacía.
Ella los ha plegado de nuevo hacia su cuerpo;
así los pétalos de una rosa cerrada,
cuando el jardín se envara
y los olores sangran de las dulces gargantas
profundas de la flor de la noche.
La luna no tiene por qué entristecerse,
mirando con fijeza desde su capucha de hueso.
Sylvia Plath
(Escrito el día antes de su muerte)
8 comentarios:
"La luna no tiene por qué entristecerse,
mirando con fijeza desde su capucha de hueso."
...hermoso y triste...
Sin palabras... he quedado pensativo durante unos minutos.
Celebro tu vuelta, amiga, se te echaba de menos (no veas la que he montado en La Cueva, con una de las entradas...).
Besossss a puñaos!!!
.
Una maravillosa Poesía donde el desapego se hace belleza.
Un abrazo y besos.
Es una maravilla... Da gusto leerlo y releerlo pausadamente.
Inma, querida, ando liada, no te olvido.
Besos!!!
La luna se entristece sí, es así y siempre será así, y lo dijo una mujer grande que estaba harta del mundo, harta de ver incongruencias e injusticias..
Hola guapísimo, ya vi la que montaste en tu entrada. ¿Sabes? yo estuve en ese pueblo o ciudad, me encantó. Para que veas lo que se ve desde fuera.
Gracias por celebrar mi vuelta, sigo y estoy cada día pero solo arreglando el entuerto. Es infinitooooo.......estoy tan cansada jobarrrrrr
Muchos besossss
Exactooo!! diste como siempre en el clavo, se hace belleza y hasta hace llorar de tanta!
Gracias amigo, abrazossss
No te preocupes preciosa, el estar ocupada es una bendición hoy en día. Y tú siempre estarás exculpada...
releerlo es lo más bonito, cuanto más lo leo más la entiendo, a ella, la gran Sylvia.
Besotesssssss
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