«Ten piedad de mi larga miseria»
Le fleurs du mal
Charles Baudelaire
Charles Baudelaire
* Las linternas de la luna
«Tus ojos tienen la sed de los presos
y el amor de las salvas,
y caigo bajo la luna
que dibuja sola mi figura
en la celda del condenado a muerte
en la celda de la nada
donde los cuernos de un ciervo embisten a la razón».
«¿Qué hay en este bosque
además del esperma amarillo de los sauces?
La risa atormentada de los labios de una ninfa».
-El beso de los ahogados:
«Toco húmeda la vagina
en donde nadie me espera
oí tu voz una noche
en la cual los gatos hacían un collar de pétalos azules.
Luego había unas florecillas que olían a mierda
y una muchacha se recreaba
mirando el culo de una libélula,
era un 14 de febrero en Arrasate
mientras me mirabas el alfabeto
y el futuro yacía a los pies del desastre»
(De Esquizofrénicas o La balada de la lámpara azul, 2004)
Cuando amanece y ya no hay nadie
y está solo el cruel despertar
y los ojos se abren una vez más
para contemplar el fin del poema,
la tumba
en que nada hay escrito
sino un secreto
entre el hombre y el hombre
y el cuerpo
como un tambor en las sombras
como la flor de la ruina
donde los cuerpos hablan
y el agrimensor mide la ruina.
* El circo
(...) Una mujer sin rostro canta de pie sobre mi alma,
una mujer sin rostro sobre mi alma en el suelo,
mi alma, mi alma: y repito esa palabra
no sé si como un niño llamando a su madre a la luz,
en confusos sonidos y con llantos, o bien simplemente
para hacer ver que no tiene sentido.
Mi alma. Mi alma
es como tierra dura que pisotean sin verla
caballos y carrozas y pies, y seres
que no existen y de cuyos ojos
mana mi sangre hoy, ayer, mañana. Seres
sin cabeza cantarán sobre mi tumba
una canción incomprensible.
Y se repartirán los huesos de mi alma.
Mi alma.
*Página veinte
Esperando todos los días para que venga el cierzo
para que venga el ciervo
azul como el poema, como el gamo
que corre fugitivo sobre el poema
y que sea la nada mi último poema
baba de los labios para que el hombre muera
azul sobre la página
«victorieusment fuit le suicide beau» Mallarmé lo dijo
oh belleza húmeda del suicidio
única rosa, única flor
rosa cúbica de la página
para que el hombre descubra
que no es un hombre.
Leopoldo María Panero, poeta español que falleció a los 65 años. Inconforme, vivía en un manicomio que solo dejaba para ir a la feria de libro de Madrid.
Loco, inteligente, con aura de Baudelaire o Rimbaud, y obsesionado con la muerte, el caos, el tabaco, la soledad o el sexo con sabor a absenta, Leopoldo Panero era el último poeta maldito, el que estaba al otro lado del espejo y al que solo le unía al mundo la palabra ya desquiciada.
Nació en Madrid, en 1948, sus padres fueron el poeta Leopoldo Panero, una de las mejores voces líricas de la posguerra, y la escritora y actriz Felicidad Blanc. Sus dos hermanos también eran poetas.
Arquetipo del "malditismo" y notorio militante de la izquierda radical, es autor
de la obra poética más radical y singular de los últimos tiempos.
Aquí van varias citas suyas y la portada de un poemario:
"Quiero la libertad y largarme de este país de mierda. En España se puede mentir, robar y asesinar en nombre de Dios. ¡Pero ay de aquellos que meen en la calle!"
"Vivo dentro de la fantasía paranoica del fin del mundo y no solo no quiero salir de ella sino que pretendo que los demás entren en ella. Todas mis palabras son la misma que se inclina hacia muchos lados, la palabra fin, la palabra que es el silencio, dicha de muchos modos”.
Todas las litografías son de Zdzislaw Beksinski
2 comentarios:
POETA al límite, casi más allá, de lectura adictiva puesto que termina uno de leer estos poemas y busca otros suyos por ahí...
Un hombre interesante, que no conocía, amiga. Bno, dicen que de ¨poeta y loco, todos tenemos un poco¨ y quí se cumple; porque escribe muy bien.
Gracias + Abrazo
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