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martes, 12 de marzo de 2013

OSWALDO GUAYASAMÍN - EL PINTOR DEL LLANTO, LA IRA Y LA TERNURA


Mi pintura es de dos mundos. De piel para adentro es un grito contra el racismo y la pobreza; de piel para fuera es la síntesis del tiempo que me ha tocado vivir. 

O. Guayasamín


Oswaldo Guayasamín nació en Quito, el 6 de julio de 1919, de padre indio y madre mestiza. Su padre trabajaba como carpintero y, más tarde, como taxista y camionero. La familia vivía en la miseria. Oswaldo fue el primero de diez hijos.


Y muere el 10 de Marzo de 1999. Por tanto, hace solo unos días que fue el aniversario de su muerte. Es por este motivo que le hago un pequeño homenaje.





Etapas de su obra pictórica:



La primera gran serie pictórica o etapa se llama Huacayñan. Es una palabra quichua que significa El Camino del Llanto. Es una serie de 103 cuadros pintados después de recorrer durante 2 años por toda Latinoamérica.


La segunda gran serie pictórica o etapa: La Edad de la Ira. La temática fundamental de esta serie son las guerras y la violencia, lo que el hombre hace en contra del hombre.


La tercera gran serie o etapa, conocida como La Edad de la Ternura o también Mientras vivo siempre te recuerdo es una serie que Guayasamín dedica a su madre y las madres del mundo y en cuyos cuadros podemos apreciar colores más vivos que reflejan el amor y la ternura entre madres e hijos, y la inocencia de los niños.




Los niños muertos




El 28 de agosto de 1932 comenzó en Ecuador “la guerra de los cuatro días”. Guayasamín es un adolescente cuando presencia estos sucesos. En ellos muere su mejor amigo, otro adolescente, en una manifestación. Años después, convertido en un potente artista de denuncia social, intensamente preocupado por los problemas humanos, la violencia, la pobreza y la injusticia, pinta lo que ha visto en 1932, representándolo con su cuadro “Los niños muertos”, simbolizando con ellos a todos los inocentes que murieron inútilmente.





Las manos de la Protesta


En sus obras siempre trata sobre temas sociales, refleja el dolor y la miseria que soporta la mayor parte de la humanidad y denuncia la violencia que le ha tocado vivir al ser humano, las guerras civiles, los genocidios, los campos de concentración, las dictaduras, las torturas, el hambre .. la desigualdad, la no-tolerancia, representaba la lucha, la esperanza y la reivindicación de los más humildes, víctimas de la humillación y el abuso por parte de los organismos de poder. Él fue un exponente de la lucha contra el colonianismo.


Es por eso que el año 1976 crea la Fundación Guayasamín, en Quito, a la que dona su obra y sus colecciones de arte, ya que concibe el arte como un patrimonio de los pueblos.





El Grito I


El Grito II

El miedo

La edad de la Ira I

La edad de la Ira II

La edad de la Ira III
El Grito III


¡¡ Tantas culturas diferentes y una sola humanidad !!






Cabeza y Mano


Las manos de la Ternura


Ternura

Borrasca en azul

Ternura

Ternura


"Lloré porque no tenía zapatos hasta que vi a un niño que no tenía pies ".. famosa cita de Guayasamín






La madre

La madre

Madre 2
Madre y niño

Niño dormido


Niña llorando




Fue amigo personal de importantes personajes del mundo, y ha retratado algunos de ellos, como Fidel Castro, García Márquez, Rigoberta Menchú, Atahualpa Yupanqui, Mercedes Sosa y Ernesto Cardenal.


"Frente a un lienzo se transformaba. Tenía dos personalidades, una humana, en la que era absolutamente cariñoso, emotivo y solidario, y la artística. Cuando se ponía a trabajar parecía que se estaba acabando el mundo, era como un trol, se encerraba con la música clásica a tope desde las siete de la mañana a la noche", cuenta su nieto.


Siempre irreverente, Guayasamil, cuyo nombre en quechua significa "Ave blanca volando", era hijo de un padre indio que le castigaba para que no pintara, algo que hizo que desde sus inicios se dedicara a retratar el sufrimiento de los pueblos, para lo que incluso visitó campos de concentración o Hiroshima.





Atahualpa Yupanqui

Fidel Castro

Las manos de Fidel

Rigoberta Menchú

Mercedes Sosa




Homenaje a Tania

La muerte del Che I

La muerte del Che II


Silvio Rodriguez


Ernesto Cardenal
Los condenados de la Tierra


Luchador


Mural de la Miseria


El Gamonal o El Dictador


El Hombre ciego


Las Beatas

Máscaras


En sus últimos años decía encontrarse trabajando en la Edad de la Esperanza, la síntesis de todos sus conocimientos técnicos y de su experiencia de la vida. 

Hoy sus restos descansan al pie de un arbolito que él mismo sembró, y que su familia denominó El árbol de la vida, un árbol en lo alto de la Capilla del Hombre, obra arquitectónica del artista, que es un homenaje a la América precolombina.





Sus Frases más emotivas:


.-Mi pintura es para herir, para arañar y golpear en el corazón de la gente. Para mostrar lo que el Hombre hace en contra del Hombre.

.- Estoy en el mismo punto, pero cada vez más hondo. Siempre golpeando hacia adentro.

.- Pintar es una forma de oración al mismo tiempo que de grito. Es casi una actitud fisiológica, y la más alta consecuencia del amor y de la soledad.

.- Soy consciente de que venimos de una cultura milenaria, alrededor de la cual se formó una civilización que alcanzó momentos de gran esplendor.

.- Pese a todo, no hemos perdido la fe en el hombre, en su capacidad de alzarse y construir, porque el arte cubre la vida. Es una forma de amar.

.- La Capilla del Hombre es un llamado a la unidad de América Latina: de México a la Patagonia, un solo país.

.- Mi obra en verdad son tres sinfonías que había diseñado en mi juventud y que estoy cumpliendo día a día.

*.- Si quieren saber más sobre su vida y obras os dejo una página que me ha gustado mucho:




http://www.ecured.cu/index.php/Oswaldo_Guayasam%C3%ADn



domingo, 10 de marzo de 2013

LOS HOMBRES HUECOS - T.S. ELIOT

Los hombres huecos viven en la piedra, se pasean por ella como cavernas móviles. Se pasean sobre el hielo como burbujas de forma humana. Pero no se aventuran por el aire, pues se los llevaría el viento. RENÉ DAUMAL




I


Somos los hombres huecos
Somos los hombres rellenos
Inclinados unos con otros
La cabeza llena de paja. ¡Pobres!
Nuestras voces secas, cuando
Susurramos juntos
Son suaves y sin sentido
Como el viento sobre el pasto seco
O pies de ratas sobre vidrio roto
En nuestra bodega seca
Figura sin forma, sombra sin color,
Fuerza paralizada, gesto sin movimiento;
Aquellos que han cruzado
con mirada decidida, al otro reino, al de la muerte
Recuérdennos, -si es que lo hacen- no como perdidas
Violentas almas, sino sólo
Como los hombres huecos
Los hombres rellenos.




II


Ojos que no me atrevo a encontrar en sueños
En el reino de los sueños de la muerte
Ellos no aparecen
Allí los ojos son
Luz solar sobre una columna rota
Allí, está un árbol balanceándose
Y las voces son
En el canto del viento
Más distantes y más solemnes
Que una estrella desvaneciéndose.
Déjame estar lejos
En el reino de los sueños de la muerte
Déjame también ponerme,
Tales disfraces deliberados
Saco de rata, piel de cuervo,
Cruces del campo santo
Que se comportan como el viento se comporta
No mas cerca -
Ni siquiera en ese encuentro final
En el reino de las penumbras




III


Esta es la tierra muerta
Esta es tierra de cactus
Aquí las imágenes de piedra
Se levantan, aquí reciben
la súplica de la mano de un hombre muerto
Bajo el parpadeo de una estrella que se desvanece.
Es así
En el otro reino de la muerte
Despertando sólo
A la hora en que estamos
Temblando con ternura
Labios que podrían besar
Componen rezos para piedras rotas.




IV


Los ojos no están aquí
Aquí no hay ojos
En este valle de estrellas que agonizan
En este valle hundido
Esta mandíbula rota de nuestros reinos perdidos
En estos últimos lugares de reunión
Vamos a tientas, juntos
Evitando hablar
Reunidos a la orilla del río caudaloso
Ciegos, a menos
Que los ojos reaparezcan
Como la estrella perpetua
Rosa multifoliada
Del reino crepuscular de la muerte
La única esperanza
De los hombres vacíos.





V



Aquí vamos alrededor del espinoso peral
Espinoso peral espinoso peral
Aquí vamos alrededor del espinoso peral
A las cinco en punto de la mañana .
Entre la idea
Y la realidad
Entre el movimiento
Y el acto
La sombra cae
Porque tuyo es el reino
Entre la concepción
Y la creación
Entre la emoción
Y la respuesta
La sombra cae
La vida es muy larga
Entre el deseo
Y el espasmo
Entre la potencia
Y la existencia
Entre la esencia
Y el descenso
La sombra cae
Pues ligero es el reino
Pues ligero es
La vida es
Pues ligera es la
Así es como el mundo acaba
Así es como el mundo acaba
Así es como el mundo acaba
No con una explosión sino con un gemido.


T.S. ELIOT, (Thomas Stearns Eliot, conocido como T. S. Eliot; Saint Louis, 1888 - Londres, 1965) Poeta, dramaturgo y crítico inglés. 

* - Eliot es uno de los dioses tutelares de mi vida, y los hombres huecos es una de las oraciones indispensables de esta religión fanática. Seguimos siendo los hombres/mujeres huecos con la cabeza rellena de paja o de serrín o de alimañas infectas, eso no cambia mucho...¿Cuándo despertaremos? (Poema escrito en el año 1925, ¿Alguien ve algún cambio en el hombre de ahora?)



sábado, 9 de marzo de 2013

A PROPÓSITO DE LA POESÍA LÍRICA GRIEGA Y EL USO DE LOS YAMBOS

Lawrence Alma-Tadema
Estos son unos yambos (pie de métrica constituido por una sílaba breve y otra larga) de Arquíloco de Paros , uno de los líricos arcaicos griegos más sarcástico, polémico y descreído, en traducción de Agustín García Calvo, otro brillante helenista:


Corazón, de tantas cuitas maltratado, corazón,
¡ea, arriba!: al enemigo ténlo a raya, y frente a él
pon el pecho; de los odios y emboscadas plántate
cerca y firme; y más, si vences, no te ufanes por doquier,
y si te vencen, no te metas en tu casa a sollozar;
no, sino goza en lo gozoso, y en los males no sin fin
penes: mira cómo al hombre olas llevan y olas traen.


Los griegos no sólo conquistaron nuevas materias de reflexión (por ejemplo, la ciencia y la filosofía) valiéndose de una forma de pensamiento previamente dada, y ampliaron algunos métodos antiguos (por ejemplo, el método lógico) sino que fueron los primeros en crear lo que llamamos pensamiento: descubrieron el alma humana como espíritu activo, inquisidor e investigador, y la base de este descubrimiento fue una nueva concepción del hombre. Este proceso, el descubrimiento del espíritu, se manifiesta en la historia de la literatura y de la filosofía griegas desde Homero: la epopeya, la lírica, el drama, los intentos de comprender de forma racional la naturaleza y la esencia humana son las etapas de este camino.

Los griegos, pues, desarrollaron una forma de expresión literaria que fue la lírica y que vino después de la epopeya y que, a su vez, precedió al drama. Los tres géneros literarios que fueron creados en esa época y que han pervivido hasta nuestros días.


Arquíloco de Paros

(Paros, actual Grecia, 712 a.C.-id., 664 a.C.) Poeta lírico griego. De padre noble y madre esclava, perdió su fortuna y estuvo arruinado durante gran parte de su vida, e incluso tuvo que trabajar como mercenario para subsistir. Rechazado por la sociedad y por su amada, Neobule, hizo de ello tema de su poesía, cruda y satírica, siendo el primer poeta de la Antigüedad en tomar la propia vida como referente poético.


Su poesía es de gran sinceridad, y destaca formalmente por el uso del metro yámbico para temas satíricos, razón por la cual se le considera uno de los principales renovadores de esta forma. Sus Yambos fueron prohibidos en Esparta, ya que iban dirigidos a Neobule y a su padre, y le acusaron de haber inducido a ambos al suicidio. 


jueves, 7 de marzo de 2013

SOBRE BERTRAND RUSSELL Y LA BELLEZA DE SU PENSAMIENTO


No es imposible para la fuerza humana crear un mundo lleno de felicidad: los obstáculos impuestos por la naturaleza inanimada no son insuperables. Los obstáculos reales se hallan en el corazón del hombre, y el remedio para éstos es una esperanza constante, encauzada y fortalecida por el pensamiento.



El mundo que tenemos que buscar es un mundo en el cual el espíritu creador esté vivo, en el cual la vida sea una aventura llena de alegría y esperanza, basada más en el impulso de construir que en el deseo de guardar lo que poseamos y de apoderarnos de lo que poseen los demás.

Tiene que ser un mundo en el cual el cariño pueda obrar libremente, el amor esté purgado del instinto de la dominación, la crueldad y la envidia hayan sido disipadas por la alegría y el desarrollo ilimitado de todos los instintos constructivos de vida que la llenen de delicias espirituales. Un mundo así es posible; espera solamente que los hombres quieran crearlo.
Mientras tanto, el mundo en el cual nosotros vivimos tiene otras finalidades. Pero éste desaparecerá, consumido en el fuego de sus ardientes pasiones, y de sus cenizas surgirá un nuevo mundo más joven, preñado de una nueva esperanza y con la luz de la alborada bullendo en sus ojos.

Bertrand Russell, fragmento de su libro "Los caminos de la libertad"