TRADUCE A TU IDIOMA

viernes, 12 de junio de 2015

ÁNGEL GONZÁLEZ - CUATRO POEMAS

Marc Chagall


INMORTALIDAD DE LA NADA

Todo lo consumado en el amor
no será nunca gesta de gusanos.

Los despojos del mar roen apenas
los ojos que jamás
(porque te vieron),
jamás
se comerá la tierra al fin del todo.

Yo he devorado tú
me has devorado
en un único incendio.

Abandona cuidados:
lo que ha ardido
ya nada tiene que temer del tiempo.


***


NADA ES LO MISMO

La lágrima fue dicha.

Olvidemos
el llanto
y empecemos de nuevo,
con paciencia,
observando a las cosas
hasta hallar la menuda diferencia
que las separa
de su entidad de ayer
y que define
el transcurso del tiempo y su eficacia.

¿A qué llorar por el caído
fruto,
por el fracaso
de ese deseo hondo,
compacto como un grano de simiente?

No es bueno repetir lo que está dicho.
Después de haber hablado,
de haber vertido lágrimas,
silencio y sonreíd:

nada es lo mismo.
Habrá palabras nuevas para la nueva historia
y es preciso encontrarlas antes de que sea tarde.


***


LA LUZ A TI DEBIDA

Sé que llegará el día en que ya nunca
volveré a contemplar
tu mirada curiosa y asombrada.
Tan sólo en tus pupilas
compruebo todavía,
sorprendido,
la belleza del mundo
—y allí, en su centro, tú
iluminándolo.

Por eso, ahora,
mientras aún es posible,
mírame mirarte;
mete todo tu asombro
en mi mirada,
déjame verte cuando tú me miras
también a mí,
asombrado
de ver por ti y a ti, asombrosa.


***


EPÍLOGO

Me arrepiento de tanta inútil queja,
de tanta
tentación improcedente.
Son las reglas del juego inapelables
y justifican toda, cualquier pérdida.
Ahora
sólo lo inesperado o lo imposible
podría hacerme ll0rar:

una resurrección, ninguna muerte.



Ángel González, (1922/2008). Poeta, catedrático y ensayista español nacido en Oviedo. Perteneciente al grupo conocido como "Generación de los 50" o del medio siglo. Dueño de una poesía humanamente comprometida, teñida de fina ironía y humor.


Marc Chagall


1 comentario:

Juan Carlos dijo...

Inma, qué cuatro poemas de Angel González tan bien escogidos. El primero me ha llevado al soneto de Quevedo "Amor constante más allá de la muerte", pero qué hermosura esta recreación del tema barroco. El tercero ya desde su título me evoca a Pedro Salinas, el poeta del amor de la generación del 27.

Es un placer pasar por tu blog, pararse un momentito y disfrutar de la belleza que has escogido. Muchas gracias por ello